Aún no se utilizaba el termino femicidio, pero sin duda fue uno de los primeros y más recordados que sacudió a Sáenz Peña y a todo el Chaco. La muerte de Nora González se produjo por la rotura del hueso hioides situado en la parte interior del cuello, por lo que se presume que la estrangularon con mucha fuerza. El 2 de abril de 1997, era asesinada Nora González de tan solo 16 años, en la ciudad de Sáenz Peña, Chaco, tal lo determinó la justicia, a manos de Hugo Daniel Randazzo, karateca instructor de la policía.
Recordando éste caso del cual se cumplen 27 años; y por el cual, actualmente no hay nadie preso, ya que el condenado karateca fue beneficiado por el 2x1 y buena conducta por lo que cumplió una pena de alrededor de 8 años y se fue a radicar a la provincia de Córdoba.
Como solía hacerlo todas las mañanas, Nora González  de 16 años salió muy temprano de su casa un miércoles 2 de abril de 1997 para dirigirse al colegio. Aquel sería el último día que la verían con vida. La familia, preocupada por la desaparición de la menor ante el paso de los días, hizo la denuncia a la policía mientras se iniciaba una desesperada búsqueda por la ciudad y alrededores pero nada más pudieron saber de Nora. Unos pocos días después de la desaparición de Nora, dos muchachos se encontraban cazando en un monte aledaño a unas viviendas de la ciudad. Tal vez, persiguiendo a una presa, los chicos se encontraron con una edificación abandonada, en aquel lugar los jóvenes cazadores se toparon con el cadáver de Nora González. El asesino tenía un arañazo en el brazo, lo que previo cotejo de ADN a las uñas de la víctima, se pudo comprobar su culpabilidad. Aunque es un caso en el que quedaron muchos cabos sueltos.

Pero hubo mucho otros femicidios, antes y después del caso Nora González, por lo que aquí se mencionan los más resonantes:

*María Luisa Quevedo, 15 años, con un cuerpo que parecía el de una chica de 12, año 1983, era de barrio Monseñor de Carlo. Desapareció cuando volvía de su trabajo camino a su casa a kas 15 horas del jueves 8 de diciembre;  su cadáver fue encontrado en la mañana del domingo 11, en un baldío entre calles 51 y 28. Su trabajo donde era empleada doméstica quedaba a 20 cuadras de su casa, trayecto que hacía a pie. Tomó tres o cuatro mates que le cebó su madre y luego salió de su casa. Fue la última vez que su familia la vio con vida. Unas amigas declararon después que la habían acompañado un trecho de regreso, pero luego María Luisa siguió sola.  Los Quevedo después de denunciar en la policía la desaparición de la "Chiqui", habían consultado una vidente, porque en la policía recibían la misma respuesta de que iba a volver, que seguro se fue con algún noviecito. En una represita con poca agua, abandonaron su cuerpo sin vida; había sido ahorcada con su mismo cinto de cuero y con signos de haber sido violada y golpeada.
Jesús Gómez, en ese momento el septuagenario a quien la familia de María Luisa señala como su asesino, fue dueño de una empresa de colectivos. Según palabras de su hermano Yogui, con esas amigas Norma Romero y Elena Taborda, dos muchachas un poco mayores que ella la pudieran haber invitado a pasar la tarde en Villa Río Bermejito, Irían además de Gómez, Francisco Suárez y Catalino Lencina, ambos empleados del primero. Esto fue ratificado por un playero de estación de servicio en testimonio. El juez Sudria, en 20 años nunca logró que las "amigas" hablaran sobre lo que sucedió con María Luisa; y el playero, luego cambió su testimonio. En ese tiempo también se habla de un aborigen de apellido Vega, a quien encontraron en estado deplorable vagando en el mismo baldío dónde fue encontrado el cuerpo, quien murió en el hospital dos años después debido a que padecía Mal de Chagas. Crimen impune.

*Maira Tévez, estudiante de profesorado de Inglés, 21 años. En 2010, su novio Héctor Ponce, la mató de un disparo en la cabeza y luego la descuartizó, y esparció sus restos en distintos lugare: brazos y piernas en una cámara séptica del departamento donde vivía la chica, la cabeza habría sido arrojada a un descampado y llevada por unos perros hasta que lo vio una vecina, el torso fue encontrado en un basural.

* En 1947. Prendió fuego a su mujer e hijitos. Mueren carbonizados. Juana Tomasa Díaz, 29 años y sus hijos Mario y Anita, de 8 y 5 años de edad. El femicida Mario Andreotti, alcohólico y celoso, roció con una lata con nafta los cuerpos mientras dormían y los prendió fuego.

*En 1958, Rosa Simunek, 23 años, vendedora de la Tienda Blanco y Negro e hija de checoslovacos, muere casi decapitada a manos de su exnovio paraguayo Víctor Cuevas de 28 años, molesto por no poder casarse con ella, en un femicidio premeditado, el 2 de julio, ocasión en que luego se suicida.

*Romina Karban, de 30 años, fue vista por última vez el 8 de mayo de éste 2024. Su cuerpo sin vida, dio cuenta que fue fusilada de 5 tiros por la espalda en un campo de Pampa Florida. Mucho misterio ronda éste caso por el que está detenido su hermano Renzo. Se espera el juicio.

* Y aún continúa desaparecida María Luz Herrera Leaño, de 26 años, la joven jujeña que se enamoró por Internet de un chaqueño y acá desapareció el 26 de septiembre de 2023, de calle 12 entre 27 y 29 del centro de Sáenz Peña, en el departamento que alquilaba su novio Ezequiel Godoy. Por el caso están detenidos su pareja y el suegro de nombre Darío, éste último con prisión domiciliaria.


Eres Chaco

(*Bibliografía:  Archivo "Eres Chaco".  Raúl Oscar López- "25: Crímenes de la Crónica Policial de Sáenz Peña" , Selva Almada- "Chicas muertas").